
La Conferencia Episcopal Venezolana (CEV) emitió un comunicado oficial en el que expresa su cercanía y solidaridad con las comunidades de los estados andinos del país, particularmente con las del estado Mérida, gravemente afectadas por las intensas lluvias de los últimos días.
“Con el corazón en oración y la mirada puesta en nuestros hermanos”, inicia el mensaje firmado por el secretario general de la CEV, monseñor José Antonio Da Conceição Ferreira, obispo de Puerto Cabello.
En el documento, los obispos lamentan los estragos que han dejado las precipitaciones, que ya han impactado directamente a al menos 273 familias, cuyas viviendas han resultado dañadas o destruidas, generando un clima de incertidumbre y sufrimiento.
“La respuesta más humana y cristiana en estos momentos es la solidaridad”
Los prelados que en estos momentos de aflicción se hace urgente la acción concreta, especialmente en materia de prevención. “Es fundamental que, como sociedad, fortalezcamos nuestras capacidades de respuesta y mitiguemos los riesgos, protegiendo así la vida y el bienestar de todos”, señalan, y remarcan: “Los organismos competentes avanzan con esfuerzos coordinados para en medio de estas circunstancias responder a las comunidades que más lo necesitan”.
Al mismo tiempo, la CEV manifiesta que la solidaridad es la respuesta más humana y cristiana ante el dolor, y exhorta a toda la ciudadanía a sumarse a las acciones de ayuda. “Hoy, más que nunca, se nos invita a tender la mano al prójimo, a compartir lo poco o mucho que tengamos”, expresa el comunicado, recordando que Cáritas de Venezuela, junto con otras iniciativas eclesiales, ya está movilizando recursos y acompañamiento en las zonas más afectadas.
“Que la caridad sea el motor que impulse nuestras acciones y que el amor al prójimo se manifieste en gestos concretos de ayuda”, exhortan los obispos, a tiempo de reiterar su disposición a seguir acompañando al pueblo: “Nuestra misión es ser testimonio vivo del amor de Cristo que nos impulsa a servir sin reservas. en medio de esta tribulación”.
Invocación a la fe
“Rogamos a Dios por el consuelo de quienes han sufrido pérdidas, por la pronta recuperación de los heridos y por la fortaleza de todos los afectados para reconstruir sus vidas”, concluye el mensaje con una invocación a la fe.
Asimismo, los obispos encomiendan al país a la intercesión de la Virgen de Coromoto, Patrona de Venezuela, “para que nos cubra con su manto protector, guiándonos en la fe y la esperanza”.